Cuando una persona fallece, se plantea la cuestión de su entierro o incineración. ¿Cómo organizar un funeral cristiano? ¿Hay que seguir velando al difunto? Puntos de referencia.
Organizar un funeral cristiano
Para organizar un funeral cristiano, es necesario prepararlo y pensar de antemano en la forma que adoptará la ceremonia, las lecturas y los cantos. También debería averiguar cuál es la posición de la Iglesia respecto al cuerpo (entierro o incineración), preparar un testamento y considerar la posibilidad de celebrar misas.
La ceremonia
No siempre es posible celebrar la Eucaristía durante el funeral, pero puede pedir a la parroquia que lo haga en otro momento. Si su familia no es muy religiosa, la misa será un lenguaje menos apropiado que una celebración sin misa pero con todos los ritos litúrgicos previstos por la Iglesia.
Las funerarias organizan sus propias ceremonias laicas. Suelen consistir en evocar al difunto mediante fotos, música, canciones, etc. Pero no consuelan porque no abren la esperanza. Es habitual escuchar, por ejemplo, que el difunto vive en el corazón de los que quedan. De hecho, podemos pensar en él con afecto y amor. Pero esto puede hacer que los vivos se sientan culpables cuando el recuerdo se desvanece. Por el contrario, la esperanza cristiana afirma que los difuntos están vivos en el Cielo, que nuestras relaciones de amor no se han roto y que estamos vinculados a ellos a través de la Comunión de los Santos.
Lecturas y canciones
Elige lecturas que digan algo sobre tu fe en relación con el tema de la muerte. Por ejemplo, el Evangelio del Buen Ladrón, la resurrección de Lázaro, la muerte de Jesús o su Resurrección. También puedes sugerir canciones, aunque no necesariamente serán seguidas, ya que deben mantenerse en el tono de las propuestas por la Iglesia.
El cuerpo
La cremación tienta a mucha gente hoy en día. Aunque la Iglesia lo tolere, no es la forma cristiana de acompañar a la muerte. La cremación hace desaparecer el cuerpo. Suele ser muy brutal psicológicamente para los familiares e impide que se reúnan después si se esparcen las cenizas. La sepultura, en cambio, muestra que los cristianos esperan la resurrección de la carne y que sus cuerpos descansan en esta espera.
El testamento
Es esencial preparar un testamento antes de su muerte para dividir sus bienes materiales. Esto permite que las sucesiones sean más pacíficas. De hecho, estamos apegados a los bienes materiales no sólo por su valor de mercado, sino también por su valor emocional y por lo que nos recuerdan. Puede expresar sus últimos deseos en un testamento, pero tenga cuidado de no imponer una carga demasiado grande a los que quedan, como por ejemplo ser enterrado en un lugar determinado. El testamento debe permitir a los que quedan atrás entrar en el tiempo de luto con tranquilidad.
El testamento espiritual
El testamento espiritual es una palabra de amor o de esperanza, un mensaje para compartir la propia fe y ayudar a los que quedan a entrar en el tiempo de duelo. Puedes regalarlo a tus seres queridos. También se puede leer en su funeral.
Masas
Pide que se celebren misas por el descanso de tu alma. En el momento de su muerte, Santa Mónica pidió a su hijo Agustín: “Acuérdate de mí en el altar del Señor. Por ejemplo, puede hacer un depósito de honorarios suscribiendo por adelantado las misas que se celebrarán después de su muerte. Cuando deposita las tasas, recibe un recibo que se entrega a una persona de confianza o a su notario. Corresponde al notario informar al santuario del fallecimiento, para que se celebren las misas.
Don Paul Denizot, Chemin d’éternité n°307
También puedes unirte a la Fraternidad Montligeon. Se beneficiará de la misa perpetua que se celebra cada día por sus miembros vivos y difuntos y de la intercesión de los grupos de oración.
¿Sigue siendo necesario velar a los muertos?
Para muchos de nuestros contemporáneos, velar a un muerto, y encima velarlo en casa, es una práctica morbosa o anticuada. ¿Por qué han desaparecido las vigilancias? ¿Qué significa la vigilia de los muertos para la Iglesia? ¿Cuál es su función? ¿Sigue siendo necesario velar a los muertos?
Antes, en Francia, se velaba a los muertos en casa durante los días anteriores al funeral. Parientes, amigos y vecinos acudían a presentar sus respetos a la familia y a pasar unos momentos con el cuerpo del fallecido. Hoy hay que admitir que esta tradición casi ha desaparecido de nuestro universo cultural.
¿Por qué ir al cementerio a rezar
ante la tumba de un ser querido?
Creemos y esperamos que nuestros difuntos estén con Dios. ¿Por qué, entonces, debemos preocuparnos por sus cuerpos muertos y enterrados? ¿Qué es el cementerio? ¿Cuál es el significado de la cruz sobre la tumba y de las flores colocadas en ella? ¿Por qué ir al cementerio a rezar ante la tumba de un ser querido?
Ciertamente, creemos y esperamos que nuestros difuntos estén con Dios, que lo vean cara a cara, tal como es. Nuestra visión del misterio de la muerte y del más allá es una visión de fe y de esperanza, orientada hacia el Cielo. No se remacha a la tierra donde yacen los restos mortales de la persona que nos ha dejado. Y sin embargo, es en nombre de nuestra fe y esperanza que tenemos que visitar y rezar en el cementerio.